sábado, 24 de noviembre de 2012

SOLIDARIDAD REVOLUCIONARIA

Este texto es de hace más de diez años, aunque no por eso deja de estar vigente. Aquí lo rescatamos para enriquecer el debate.

SOLIDARIDAD REVOLUCIONARIA

El concepto de solidaridad ha sido utilizado y de él han abusado la variedad de sindicalistas reformistas y movimientos humanitarios y hasta el poder mismo; también ha sido vaciado de contenido por muchos anarquistas. El balance es tal que revela una actitud simbólica equiparable a la de una iglesia que nos permite poner a descansar nuestra conciencia.

Primero contrainformación y propaganda, manifestaciones (auténticas procesiones), luego nada, provocan un sentimiento de impotencia, una frustración perjudicial que ve como la justificación abre el camino a la resignación.

Descubrimos que todo se desmorona allá donde la mentalidad del grupo y la mentalidad cuantitativa eran fuertes. Nada cambia cuando entramos en un círculo vicioso con tristes llamadas a un miserable trato con el estado contra el que a uno le gustaría luchar.

Cuando los individuos se encuentran solos durante la noche, ya sin el apoyo de la "fuerza colectiva", los brazos de Morfeo transforman a lxs compañerxs presxs a los que uno quería expresar su solidaridad, en un verdadera pesadilla sin salida. ¡Entonces! ¿Deberíamos dejar de mostrar nuestra solidaridad a lxs compañerxs presxs debido a que no sirve para ningún fin?

¡Nunca! Un movimiento que no es capaz de cuidar de sus compañerxs presxs está destinado a morir, y esto a un alto precio de torturas atroces.

La reflexión debe ser hecha en otros términos. ¿Qué quiere decir expresar solidaridad revolucionaria? A un nivel básico la respuesta no es tan fácil.

La solidaridad se basa en la acción. Acción que hunde sus raíces en el proyecto propio de uno que se lleve adelante coherentemente y dignamente también, especialmente en momentos donde pueda ser peligroso hasta expresar las propias ideas en público. Un proyecto que exprese solidaridad con alegría en el juego de la vida que sobre todo nos libera a nosotrxs mismxs, destruye la alineación, explotación, probreza mental, abriendo infinitos espacios dedicados a la experimentación, a la actividad continua de la mente de uno en un proyecto enfocado a realizarse en insurrección..

Un proyecto que no esté específicamente ligado a la represión que ha golpeado a nuestros compañeros sino que continúe evolucionando y haciendo crecer la tensión social, hasta el punto de hacerla explotar de manera tan fuerte que los muros de las prisiones se caigan pro sí mismos.

Un proyecto que sea un punto de referencia y de estímulo para lxs compañerxs presxs, quienes su vez son un punto de referencia para el mismo.

La solidaridad revolucionaria es el secreto que destruye los muros expresando amor y odio al mismo tiempo en la propia insurrección personal en la lucha contra el estado y el capital.

Daniela Carmignani

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